Previsto el reinicio oficial del turismo en el país para el 15 de noviembre próximo mediante estrictos protocolos sanitarios para enfrentar a la Covid-19, tiene en el principal balneario del archipiélago una punta de lanza perfecta.
Fernández significo que a diferencia de otros destinos, Varadero no dejó de trabajar, y, si bien opera a bajos niveles, lejos de su actividad habitual, continuó recibiendo turistas y hoy está activo en todos los procesos de la industria.
Otra cosa a su favor, dijo, es que el 98 por ciento de la fuerza laboral recibió la vacuna contra la pandemia de factura nacional.
Especificó que de cierta forma, eso constituye una ventaja de cara a la reapertura del 15 de noviembre, mientras dejó claro que, tras ese momento, Varadero acogerá tanto a turistas extranjeros como a vacacionistas nacionales.
Cuando la Covid-19 tocó tierra en la isla, en el polo de fama mundial había casi 35 mil viajeros disfrutando de su playa y de las bondades del turismo cubano, el más seguro del planeta, insistió.
Las instalaciones estaban casi al tope y se presagiaba un excelente año, recordó la funcionaria.
Después de año y medio, y agobiados por estos largos meses de pandemia, muchos clientes asiduos acarician la idea de vacacionar en la Playa Azul, y dedicarse al menos un fin de semana.
El deseo de disfrutar del balneario comprende a los turistas nacionales, un mercado que crece progresivamente y que, desde hace cinco años, se sitúa en el segundo escaño, detrás de Canadá, entre los principales mercados emisores, especificó.
En 2020 se alojaron en Varadero más de 80 mil vacacionistas nacionales, y se pronosticaban unos 300 mil en el actual año, sobre todo en la época de verano, comentó Fernández.
Esclareció que el acceso a las instalaciones del polo será de acuerdo con la respuesta de cada provincia en su enfrentamiento a la enfermedad, y que el pago puede ser también en la moneda nacional (CUP), al tipo de cambio de 24 pesos cubanos por un dólar, como está recogido oficialmente.
Agregó que una de las mayores fortalezas cubanas cuanto al turismo es el contacto con el pueblo, amable, solidario, que marca una diferencia como destino turístico.
Recordó que el sector turístico en Cuba fue muy afectado por la pandemia y por un bloqueo (presiones económicas, financieras y comerciales) recrudecido de los Estados Unidos, que entre sus principales medidas apunta a dañar la actividad recreativa. mem/rfc