En carta enviada al ministro germano del Interior, Horst Seehofer, el gremio expuso el riesgo para la salud de los agentes en esa área geográfica, según informó el diario nacional Bild.
Desde hace varios meses, el número de aprehensiones aumentó de forma casi explosiva, alcanzando niveles cercanos a los de 2015, cuando arribaron a esta nación más de un millón de refugiados, destaca la misiva.
Nuestros colegas están expuestos a un riesgo sanitario considerable, ya que los contagios de SARS-CoV-2, virus causante de la Covid-19, son muy elevados y las normas de higiene, habituales en Alemania y Europa, no se respetan en el proceso de contrabando, según el texto.
El tema migratorio en esa zona tiene un trasfondo político pues mientras los gobiernos de Letonia, Lituania y Polonia culpan al presidente bielorruso Alexander Lukashenko de llevar a refugiados a la frontera exterior de la Unión Europea (UE)de forma organizada, este último calificó de ‘catástrofe humanitaria’ esa situación.
Las naciones de la UE que colindan con nuestro país ‘implantaron un estado de emergencia y no permiten la presencia de nadie para encubrir cómo mueren allí seres humanos’, sentenció.
Lukashenko subrayó la importancia de realizar consultas para enfrentar tal desafío de manera conjunta lo más pronto posible, teniendo en cuenta la cercanía del invierno y las condiciones en que se encuentran estas personas, según la agencia de noticias Belta.
En ese contexto Polonia, Letonia y Lituania denunciaron días atrás un aumento del número de inmigrantes indocumentados que intentan entrar desde Belarús, luego que el presidente de esta última nación informara que su país ‘no tiene ni dinero ni fuerzas’ para enfrentar el problema, en particular, por las sanciones occidentales.
mem/ehl