Todos los religiosos están vivos y sus captores mostraron evidencias, dijo al diario Le Nouvelliste una fuente de la DPCJ, institución que lidera los esfuerzos para la liberación de las víctimas con ayuda de la estadounidense Oficina Federal de Investigación, conocida como FBI.
El 16 de octubre los misioneros que integran la organización Christian Aid Ministires, con sede en Ohio, Estados Unidos, fueron secuestrados en Ganthier, zona bajo el control de la pandilla 400 Mawozo.
La semana pasada, el líder de ese grupo armado amenazó con asesinar a los miembros del grupo, entre los que figura un bebé de ocho meses y otros cuatro menores, si no recibía el pago reclamado.
‘Mataré a todos ellos si no obtengo lo que pedí’, aseguró Lanmò san jou (Muerte sin días), en un video que circuló en las redes sociales.
Se estima que la pandilla pide unos 17 millones de dólares para liberar a las víctimas, muchas de las cuales visitaban el país por primera vez, aunque Washington negó que negociaran con los secuestradores.
El Centro de Análisis e Investigación en Derechos Humanos reveló que los religiosos estaban acompañados por al menos un haitiano que fungía como chofer.
Esta institución registró 782 secuestros desde enero y reveló que de julio a septiembre los casos se triplicaron con respecto a los meses anteriores.
Por su parte, los enfrentamientos entre bandas armadas iniciados en junio provocaron la muerte de más de un centenar de civiles, mientras más de 19 mil personas fueron empujadas de Martissant, un barrio pobre en la salida sur de la capital.
npg/ane