El Partido de Dios calificó de valiente postura la de Kordahi desde su posición, ante los medios noticiosos y en el nivel nacional.
La autodenominada Resistencia islámica libanesa también denunció la campaña injusta contra el ministro que llevan a cabo Riad, Abu Dhabi y el Consejo de Cooperación del Golfo.
Tal acción, precisa el texto, constituye un asalto a la soberanía de Líbano y un chantaje desafiante a la dignidad de los libaneses.
Los gobiernos saudita y emiratí recabaron la destitución de Kordahi por su crítica a la guerra que impusieron desde 2015 al pueblo yemenita, causante del peor desastre humanitario en el mundo.
La declaración de Hizbulah también repudia posiciones de profesionales de la prensa y medios libaneses que participan en esa campaña, a la cual estima de fracaso moral.
Kordahi emitió sus opiniones en agosto pasado, un mes antes de incorporarse al gabinete ministerial y en respuesta a Riad, Abu Dhabi y el Consejo del Golfo, dijo: ‘No he hecho daño a nadie y no me disculparé por lo que expresé en aquel momento’.
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