Las nuevas reglas estipulan que todos los empleados federales y aquellos que laboran en compañías con una plantilla superior a las 100 personas deberán presentar sus certificados de inmunización completa con los fármacos de Pfizer/BioNTech, Moderna o Johnson & Johnson.
El presidente Joe Biden promocionó los requisitos en un comunicado en el cual pide a los empleadores actuar con la mirada en el futuro y aseguró que la vacunación es la mejor vía para salir de esta pandemia.
El ejecutivo de este país norteamericano recibió llamados de algunos grupos empresariales para retrasar o ser flexible con el plazo de vacunación para evitar más estrés en los problemas de la cadena de suministro antes de las vacaciones de Navidad.
Ante esas alertas, los funcionarios federales retrasaron la idea inicialmente prevista del 8 de diciembre para el 4 de enero en aras de facilitar que las empresas y los empleados cumplan con los requisitos.
En Estados Unidos más de 60 millones de personas se resisten a recibir las dosis necesarias para enfrentar el coronavirus SARS-CoV-2, causante de la Covid-19.
Por esa razón la Casa Blanca apostó por los mandatos de vacunación, pese a las críticas de los republicanos, para quienes esas exigencias atentan contra las “libertades personales” y llegaron a presentar demandas legales contra la administración Biden, como es el caso del estado de Florida.
No obstante, el anuncio de este jueves deja claro que las reglas de vacunación prevalecerán sobre cualquier ley estatal o local destinada a prohibir los mandatos u otras medidas para limitar la propagación de Covid-19.
Estados Unidos superó hoy las 750 mil muertes por la enfermedad, mientras encuestas revelan que la mayoría de los ciudadanos cree que contener la pandemia no es una prioridad para el Gobierno federal a pesar de los mandatos de inmunización.
mem/avr