Según el recuento oficial de la Universidad Johns Hopkins, desde el inicio de la enfermedad causada por el virus SARS-CoV-2 hasta este jueves el país contabiliza 750 mil 431 decesos confirmados.
Según los datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), en Estados Unidos se registraron más de 74 mil nuevos casos de Covid-19 el martes y más de 125 mil el día anterior.
La noticia llegó en un momento en que, según un nuevo sondeo de Reuters/Ipsos, solo el 12 por ciento de los ciudadanos considera que los problemas de salud pública, como el virus y sus variantes, son una prioridad nacional.
Este porcentaje es menor que el 20 por ciento de febrero, lo que muestra un cambio gradual en el enfoque de la administración del presidente Joe Biden hacia otros temas, como la inflación y el mercado de trabajo.
El sondeo mostró que el 73 por ciento de los adultos quiere que los líderes políticos se centren en el crecimiento económico y el auge de empleos.
Los casos parecían tender a la baja en octubre pasado, por lo que el presidente elogió los progresos, al tiempo que advirtió que este sería un período decisorio.
El ocupante de la Casa Blanca dijo entonces que el número de estadounidenses no vacunados, 66 millones, suponía una mejora con respecto a los 100 millones de julio, pero era todavía inaceptablemente alto.
Ahora no es el momento de aflojar. Tenemos mucho más que hacer. Estamos en un periodo muy crítico mientras trabajamos para dar un giro a la Covid-19, advirtió.
Este martes la directora de los CDC, Rochelle Walensky, autorizó que los niños de hasta 5 años reciban dosis de la vacuna de Pfizer.
La autorización hace que unos 28 millones de infantes puedan ser inmunizados contra el SARS-CoV-2, lo que supone una buena noticia para los padres deseosos de vacunar a sus hijos antes de las vacaciones de invierno.
Actualmente el 78 por ciento de los estadounidenses mayores de 12 años fue inmunizado parcialmente, mientras que el 68 por ciento completó el esquema de vacunación.
Las autoridades sanitarias insisten en la vacunación como única alternativa para frenar la pandemia
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