El vicesecretario general de la autodenominada Resistencia islámica libanesa, Naim Qassem, consideró injusta la posición adoptada por el reino del desierto respecto a declaraciones del ministro de Información George Kordahi.
A juicio de Qassem, Kordahi no se equivocó al estimar absurda la guerra en Yemen y opinar que los rebeldes hutíes enfrentan una agresión liderada por los sauditas, destacó la versión digital del periódico Ad Diyyar.
Retirar embajadores como hizo Riad responde a un problema militar, asesinato, combates o una agresión concreta, pero Líbano no ha hecho nada, y el pretexto para esa decisión se basa en opiniones que están en la boca de todos, dijo.
Cualquiera tiene derecho a emitir sus criterios sobre un conflicto armado, agregó, a favor, en contra o ser partidario u oponente.
Con posterioridad, añadió, salió a la luz la verdad del asunto, Hizbulah, por su presencia y capacidad en Líbano.
Empero, pero como no hay evidencia o un problema directo con la Resistencia islámica eligieron el camino de una posición calificada por todos de ridícula y sin valor.
No les quedó más remedio entonces que reconocer la real intención de su injustificada y desmesurada decisión, ir contra el Partido de Dios, subrayó.
Arabia Saudita violó con sus medidas normas diplomáticas e irrespetó al Ministerio de Relaciones Exteriores, al primer ministro y a las autoridades de este país, puntualizó, al expulsar al embajador libanés de Riad, un insulto a las relaciones bilaterales.
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