El jefe de la Casa Blanca aseguró en Twitter que el país “necesita un liderazgo firme, independiente y eficaz” y por eso mantendrá a Powell, como presidente de la Junta de Gobernadores del Sistema de la Reserva Federal.
El ala más progresista del Partido Demócrata se inclinaba por Lael Brainard, defensora de las cuestiones climáticas en la regulación bancaria y la política monetaria a quien Biden decidió dejar como vicepresidenta del ente monetario.
Ambos nombramientos, que deberán ser confirmados por el Senado, se producen mientras la economía del país intenta recuperarse de los efectos de la pandemia de Covid-19 y cuando la inflación se encuentra en los niveles más altos en 30 años.
Usaremos nuestras herramientas tanto para apoyar la economía y un mercado laboral fuerte, como para evitar que se arraigue una inflación más alta, que afecta especialmente a aquellos con menos capacidad para cubrir los costos de productos básicos, dijo Powell este lunes en la Casa Blanca.
Las acciones estadounidenses alcanzaron máximos históricos después de la noticia, los rendimientos de los bonos del Tesoro también aumentaron y el dólar se fortaleció.
Medios especializados indican que la reelección de Powell fue alentada por una muestra representativa de inversores y economistas con inclinaciones conservadoras y liberales.
Nombrar a un presidente de la FED con esas características podría considerarse una forma con la cual Biden busca ganar apoyo para aprobar en el Senado el proyecto de ley de beneficios sociales de 1,75 billones de dólares, un pilar de la agenda económica del mandatario.
jha/avr