La repercusión de los informes periodísticos sobre el caso amagó además sobre la mayoría de las bancadas que rechazan el cese del jefe de Estado o no se han sumado a la vacancia planteada la semana previa.
“Como jefe de Estado, no avalo ningún favorecimiento a ninguna empresa ni persona en particular. Exhorto a las autoridades a que, si hubiese pruebas de algún indicio de corrupción durante mi gestión, realicen su trabajo para esclarecer los hechos en el marco de la ley”, manifestó Castillo en un Twitter sobre el tema.
Pese a ello, los promotores de la vacancia coincidieron en atribuir tratos indebidos al mandatario, quien según coincidentes reportajes de varios canales de televisión, tenía reuniones furtivas en un departamento en el cual se alojaba antes de asumir el cargo.
Uno de los más enconados promotores del cese del mandatario por el parlamento, José Cueto, del grupo de derecha extrema Fuerza Popular, sostuvo que las citadas citas son “a todas luces irregulares” y violan las leyes que obligan a los altos funcionarios a recibir visitas solo en sus despachos y a hacer público con quienes lo hace.
Agregó que las reuniones, según los reportajes, se realizaron a altas horas de la noche, y una de los asistentes es asesora de una empresa que logró ganar el contrato de una obra importante.
Desde el centro del espectro parlamentario, el legislador José Jerí, del grupo parlamentario Somos Perú, dijo que la relación confirma que Castillo “está muy mal asesorado” respecto a los procedimientos irregularidades prohibidos por la legislación de transparencia, lo cual genera mucha suspicacia por el tipo de interlocutores.
Sobre la posibilidad de que lo sucedido influya sobre el resultado del intento de vacar al mandatario, el cual se discutirá preliminarmente en el Parlamento el 7 de diciembre próximo, dijo que el tema debe ser investigado por las autoridades pertinentes,
Por su parte, la ministra de la Mujer, Anahí Durand, advirtió que el ruido político y los reportajes “no pueden definir la continuidad de un presidente» elegido por voluntad popular y llamó a poner las cosas en su real dimensión y no exagerar ni generar zozobra ni desestabilización.
Asimismo, opinó que la intención de una vacancia presidencial le parece una maniobra de “un sector golpista que sigue lamentándose de los resultados electorales”, que favorecieron a Castillo.
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