Los resultados de lo comicios del pasado 3 de noviembre para la gobernación en ese estado, sugieren que los miembros de la fuerza roja (color que identifica al Partido Republicano), lograron hacer incursiones en ese grupo, en opinión de observadores.
Glenn Youngkin tuvo un buen desempeño en su carrera para gobernador porque el electorado femenino lo ayudó, en parte, a convertirse en el primer republicano en ganar una elección estatal en Virginia desde 2009, señalaron.
Los republicanos dicen que esperan emplear la disciplinada estrategia de Youngkin de mantenerse centrado en los temas como la economía, delincuencia y educación con el fin de sumar más apoyo dentro de ese segmento.
Cuando hablo con los votantes, les preocupa la inflación y la educación de sus hijos, dijo la presidenta de la Conferencia Republicana de la Cámara de Representantes, Elise Stefanik (Nueva York).
El enfoque de Youngkin en esas cuestiones fundamentales, así como en la delincuencia, dio sus frutos el día de las elecciones, especialmente en los suburbios, añadió.
Según ABC News, el gobernador electo (asumirá el cargo el 15 de enero de 2022) obtuvo el voto suburbano por un 53 por ciento contra un 47 por ciento de su oponente.
Joe Biden ganó ese mismo electorado en Virginia (53 por ciento) en las elecciones presidenciales del año pasado.
El porcentaje de mujeres blancas que respaldan a los republicanos en Virginia aumentó del 49 por ciento en 2020 al 57 por ciento en 2021, mientras por los demócratas disminuyó del 50 al 43 por ciento en igual periodo.
Los estrategas republicanos sostienen que el tema del aumento de los precios y la crisis de la cadena de suministro funcionará especialmente bien con las mujeres en los hogares, porque son ellas las que «hacen los presupuestos mensuales en sus familias», dijo Sarah Chamberlain, directora general de la Republican Main Street Partnership.
Sin embargo, los azules (demócratas) apuestan a ganancias entre las mujeres si logran introducir en la campaña el debate sobre el aborto, ya que se prevén cambios potencialmente importantes en el derecho a la interrupción del embarazo en junio de 2022.
Para esa fecha se espera que el Tribunal Supremo se pronuncie sobre una ley de Misisipi que prohíbe la mayoría de los abortos después de las 15 semanas de gestación.
Las elecciones intermedias de 2018 y las presidenciales de 2020 supusieron importantes ganancias para los demócratas a nivel suburbano en lo que se describió como un repudio al entonces presidente Donald Trump.
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