El fiscal general del Estado, Juan Lanchipa, calificó de preocupante esta situación y alertó que las cifras pueden aumentar antes de concluir el año.
Llamó la atención acerca de la alta incidencia reportada en el departamento de La Paz, con 43 feminicidios, de los cuales más de la mitad ocurrieron en la ciudad de El Alto.
En los departamentos de Santa Cruz se cometieron 16 hechos de esta índole, 15 en Cochabamba, 10 en Potosí, otros 10 en Oruro, en Chuquisaca seis, en Beni tres, también tres en Tarija y uno en Pando, citó el periódico Ahora el Pueblo.
Según la Fiscalía, en 2020 se cometieron 113 crímenes contra mujeres en el país, 117 en 2019, 128 en 2018, 109 en 2017 y 111 en 2016.
De acuerdo con la jefa de la oficina de ONU Mujeres en esta nación, Nidya Pesántez, Bolivia es el país de Sudamérica con la tasa más alta de feminicidios, sin embargo destacó que tiene un marco jurídico nacional avanzado, progresista, “pero no hemos logrado que se aplique plenamente la norma”, dijo.
La Ley 348 Integral para Garantizar a las Mujeres una Vida Libre de Violencia enumera 16 tipos violencia, entre ellas están: la violencia psicológica, física, sexual, patrimonial y económica, mediática, institucional, intrafamiliar, feminicida, mediática, entre otras.
Para la directora de Prevención y Eliminación de Toda Forma de Violencia en Razón de Género y Generacional del Ministerio de Justicia, Claudia Peña, la violencia intrafamiliar es el delito más cometido en Bolivia.
«La violencia intrafamiliar es el delito más cometido en Bolivia, más que robo y estafa. Estamos diciendo que las mujeres no estamos seguras en nuestras propias casas, que debería ser el lugar más seguro», reprochó.
Desde el Gobierno nacional y algunas organizaciones no gubernamentales en defensa de los derechos de las mujeres, se llevan adelante diversas campañas para sensibilizar a la población sobre este flagelo.
El Gobierno declaró a la gestión 2022 como el Año de la Revolución Cultural para la Despatriarcalización, con el objetivo de erradicar la violencia de género, por lo que se trabajará en tres ejes de acción, desde lo estructural, normativo e institucional.
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