Los objetivos de establecer la igualdad y la justicia social en el país inspiraron al pueblo a participar en la sangrienta guerra de independencia de Pakistán, que duró nueve meses, reflejó el portal New Age.
Tras una hambruna en 1974 y convulsiones políticas antes y después de la década de 1980, el país experimentó un importante cambio de política económica con una participación dominante del sector privado en la economía desde inicios de la década de 1990.
Desde entonces, el crecimiento económico se aceleró y la pobreza disminuyó, aunque grandes proporciones de la población siguen vulnerables, pues sus ingresos no aumentaron.
La desigualdad también creció de forma alarmante mientras los economistas señalan que el 5,0 por ciento de la población más rica posee más del 95,0 por ciento de los ingresos totales del país.
El coeficiente de Gini, que representa la desigualdad de la riqueza en un país, era de 0,42 en 2005 en Bangladesh y aumentó hasta el 0,48 en 2016.
Cuanto mayor es el valor del coeficiente de Gini, mayor es la desigualdad en la sociedad.
El tamaño de la población ultra rica en Bangladesh creció más rápido que en cualquier otro país entre 2010 y 2019, según un informe de la empresa de investigación Wealth-X.
El director ejecutivo del Policy Research Institute, Ahsan H Manusr, afirmó que el crecimiento económico del país benefició en gran medida a los más ricos, debido principalmente a la disparidad de los ingresos.
Bangladesh registró un crecimiento anual superior al 6,0 por ciento de promedio en la última década, y un crecimiento del 3,5 por ciento incluso durante la pandemia de Covid-19 en 2019-20.
Según estimó el Fondo Monetario Internacional, la renta per cápita de Bangladesh era de mil 888 dólares frente a los mil 877 dólares de India en 2020.
Los indicadores de desarrollo social del país, como equidad de género, empoderamiento de la mujer, tasa de mortalidad y esperanza de vida, también fueron mejores que los de India en ese año.
Gracias a la entrada de remesas, las exportaciones de prendas de vestir y la creciente producción de alimentos por parte de los agricultores, la dinámica de la economía cambió, creando sólidas clases de consumidores y fabricantes en el país.
En 2020-21 el país recibió 24 mil 770 millones de dólares en remesas que ayudaron a presumir de una reserva de divisas de más de 45 mil millones de dólares, superior a lo necesario para el pago de importaciones de tres meses.
Se espera que Bangladesh deje atrás su condición de país menos desarrollado en 2026.
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