«Mientras yo esté al frente del Ministerio de Hacienda y el presidente Nayib Bukele al frente del gabinete, no vamos a aumentar el IVA», recalcó Zelaya en declaraciones a una televisora local.
El Salvador grava actualmente cada producto de consumo con un 13 por ciento de su precio, y aquí se especula que el Fondo Monetario Internacional exige su alza para aprobar un crédito de mil 300 millones de dólares.
Las negociaciones de dicho préstamo se estancaron con la promulgación aquí de una ley que avala la circulación del bitcoin como moneda de curso legal, amén del creciente distanciamiento político entre San Salvador y Washington.
Zelaya agregó que las futuras medidas para el ordenamiento de las finanzas del Estado priorizarán la protección económica de las familias salvadoreñas.
«Esto no implica en ningún momento incremento en los impuestos, eso no está incluido», enfatizó el funcionario, quien abogó por la implementación de medidas contra la evasión fiscal.
A finales de 2021, la Asamblea Legislativa (Parlamento) de mayoría oficialista aprobó un presupuesto general del Estado cercano a los ocho mil millones de dólares para el ejercicio fiscal de 2022.
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