“Creemos que los sucesos en Kazajastán no representan el primer y, ni mucho menos, el último intento de interferir en los asuntos internos de nuestros estados”, advirtió el mandatario en la reunión extraordinaria del Consejo de Seguridad Colectiva de la OTSC a través de videoconferencia.
Puntualizó que las medidas adoptadas dentro del grupo militar integrado por Armenia, Belarús, Kazajastán, Kirguistán, Rusia y Tayikistán también demostraron que “no se permitirá la desestabilización de la situación en nuestra casa”.
Putin llamó la atención sobre la “cronología de los acontecimientos”, iniciados por la incitación de los ciudadanos a las protestas a través de Internet y las redes sociales.
Dijo que estas comunicaciones fueron precursoras de los atentados terroristas. “Es bastante evidente, todos nosotros lo vimos”, comentó.
Según el jefe de Estado ruso, los hechos confirmaron la utilización del espacio cibernético y las redes sociales para reclutar a extremistas y terroristas.
En tal sentido, solicitó encargar al comité de secretarios del Consejo de Seguridad de la OTSC que se presenten propuestas para reaccionar de manera conjunta a los intentos de injerencia externa destructiva en la zona de responsabilidad de la OTSC.
El presidente ruso expresó que durante los sucesos de los últimos días Kazajastán se enfrentó a la agresión del terrorismo internacional.
“¿De dónde salieron esas bandas de personas armadas, entrenadas en centros extranjeros y, claramente, con experiencia en operaciones de combate en zonas conflictivas del mundo?”, preguntó.
Manifestó que los países de la OTSC deben estar preparados para repeler cualquier provocación y llamó a que “los trágicos acontecimientos que atraviesa hoy Kazajastán no nos tomen por sorpresa a partir de ahora”.
En el intercambio, el presidente kazajo, Kasym-Zhomart Tokáyev, indicó que los terroristas actuaron con especial crueldad durante los disturbios en su país.
“Fueron ataques de profesionales bien entrenados, incluidos francotiradores con rifles especiales. Los terroristas usaron comunicación propia, se disfrazaron con uniformes militares y policiales”, explicó.
Denunció que los implicados se mezclaron con los participantes en las protestas para que les sirvieran de escudos humanos.
“Con una ventaja numérica de al menos cinco veces, los bandidos atacaron a la Policía y al personal militar, los golpearon con extrema crueldad”, subrayó.
Durante el ataque a unidades militares y puestos de control del Ejército de Kazajastán los asaltantes intentaron apoderarse de armas y equipo de combate, narró Tokáyev.
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