En un comunicado, un enfurecido Trump volvió a insistir en su falsa teoría de que los comicios en los que resultó derrotado por el demócrata Joe Biden fueron amañados y prometió negar su apoyo a Rounds cuando se presente a la reelección en 2026.
«¿Está loco o simplemente es estúpido?» dijo en el texto el exmandatario, quien es visto como un potencial candidato a la presidencia en 2024.
Según el magnate neoyorquino, los números son concluyentes y los votos fraudulentos e irregulares son masivos.
La única razón por la que hizo esto es porque consiguió mi apoyo y ganó fácilmente su estado en 2020, acotó Trump al referirse al legislador.
“Aunque su elección no llegará hasta dentro de cinco años, no volveré a respaldar a este imbécil», subrayó en sus ofensas.
Múltiples auditorías y revisiones a nivel estatal de las elecciones del 3 de noviembre de 2020 no pudieron aportar pruebas de las alegaciones del exgobernante, que es figura frecuente en la vida pública a diferencia de otros expresidentes.
Tras tildarlo de “débil e ineficaz”, Trump también calificó a Rounds de «RINO» -republicano solo de nombre- y aseguró que los “senadores” como él no facilitan el éxito de Estados Unidos.
Las declaraciones del exjefe de la Casa Blanca ocurrieron un día después de que el miembro del Senado planteara durante una entrevista en el programa “This Week» de la cadena ABC que aquellos comicios fueron, efectivamente, justos.
Además, señaló que las diversas revisiones de los supuestos casos de fraude establecían que la victoria de Biden es legítima y que no hubo irregularidades elevadas al punto de cambiar el resultado de la votación en un solo estado.
«La elección fue justa, tan justa como hemos visto», agregó al enfatizar que simplemente “no ganamos la elección como republicanos para la presidencia».
Las alegaciones de Trump sobre las elecciones falsas son una especie de prueba de fuego para los de la fuerza roja, y el exocupante del Despacho Oval carga contra cualquier funcionario o candidato del partido que rompa con él en este tema.
De hecho, ya prometió hacer campaña contra un puñado de republicanos que se niegan a seguirle la corriente, incluida la senadora Lisa Murkowski.
La legisladora de Alaska fue una entre los siete integrantes de la Cámara Alta que votaron el año pasado para condenar a Trump en su segundo juicio político por su papel en los disturbios del 6 de enero de 2021 en el Capitolio, que dejaron cinco muertos y más de 140 agentes policiales heridos.
acl/dfm
