Con un aumento notorio de los menos favorecidos, algunos marcan y etiquetan sus territorios para que otros no toquen sus posesiones.
Incluso familias más acomodadas venden sus desechos porque pagan dólares por ellos las pocas industrias dedicadas al reciclaje en este país.
La lucha por la basura muestra el descenso de la vida en Beirut, otrora reconocida por su espíritu emprendedor, sector bancario estrella y vida nocturna.
Las estadísticas reflejan que casi 80 por ciento de los residentes en la llamada nación de los cedros cayó por debajo del umbral de la pobreza, situado en 3,64 dólares diarios, según organismos internacionales.
El reciclaje ya era un problema antes de la corriente crisis económica, la peor en décadas, con protestas contra las autoridades, por cuya negligencia había acumulaciones de desechos a montones en las calles.
Cada día es más frecuente ver a adolescentes con bolsas dedicados a registrar contenedores en la búsqueda de cualquier material recuperable.
Ese comercio solía ser de los sirios desplazados ante la guerra en el vecino país, pero hoy día hay una notoria incorporación de libaneses caídos en desgracia.
“Vamos al basurero donde vendemos lo que recolectamos y encontramos también a libaneses”, dijo un sirio que habló con el sitio Naharnet a condición de anonimato.
Los empleados de los restaurantes y los conserjes de los edificios comenzaron a clasificar la basura para venderla y eso deja poco margen para nosotros, agregó.
Empresas especializadas en reciclaje pagan por un kilogramo (kg) de bolsas de plástico 20 centavos de dólar, por uno de plástico más resistente, 30, y por cada kg de aluminio, un dólar.
Si bien eso no parece mucho, la depreciación de más de 100 por ciento de la moneda nacional supone una ganancia agregada para quienes aún conservan sus puestos de trabajo, pero sus salarios son en libras libanesas.
Ese acceso a divisas origina que un oficio antes despreciado en la sociedad, sea ahora una actividad peligrosa y convierta en enemigos de armas tomar a quienes defienden sus parcelas de basura.
acl/arc