Un comunicado señaló, además, este lunes que entre los asuntos a verificar está la liberación al mar del agua radiactiva tratada de la planta afectada, fijada para la primavera de 2023.
Durante su estancia en el país, prevista del 14 al 18 de febrero, los expertos evaluarán la seguridad de verter el agua contaminada de la central de Fukushima Daiichi casi 11 años después del desastre provocado por un fuerte terremoto y un tsunami en la zona.
Los gobiernos de China y Surcorea, así como el sector pesquero local, continúan oponiéndose a la decisión, tal y como lo reflejó la agencia de noticias Kiodo.
La llegada de los expertos del OIEA estaba anunciada, en un inicio, para mediados de diciembre, pero tuvo que ser pospuesta debido al alto nivel de contagios provocado por la Covid-19.
mgt/rfc