“Bolivia después de cuatro semanas consecutivas de descenso puede decir que ha ingresado a una desescalada epidemiológica, el pico de la cuarta ola de la pandemia se ha registrado en la segunda semana epidemiológica del 2022 con 77 mil 238 casos a nivel nacional”, afirmó el titular.
Añadió Auza que en los últimos siete días el país continuó con la disminución del número de enfermos, no obstante, insistió en que el mal provocado por el coronavirus SARS-Cov-2 no ha desparecido y que se deben extremar las medidas de bioseguridad.
Describió que por departamentos en la sexta semana epidemiológica del año en curso Santa Cruz reportó cuatro mil 528 casos (-20 por ciento), Pando 213 (-44 puntos porcentuales), Cochabamba dos mil 352 (-51 unidades sobre 100) y Chuquisaca 438 (-65 por ciento).
Otros territorios con tendencia a la baja fueron Tarija, 404 (– 67 por ciento); La Paz, dos mil 653 (–58 unidades porcentuales), Oruro, 507 (-65 por ciento) y Potosí, 453 (–57 puntos sobre 100).
El departamento de Beni con 385 enfermos resultó la excepción con un incremento del 10 por ciento.
Según Auza, hasta la fecha 750 mil 631 bolivianos se recuperaron del mal, mientras que los decesos en los últimos siete días fueron 155, indicador inferior al de las primeras cinco semanas de 2022, para un total de 21 mil 129 fallecidos desde el comienzo de la pandemia en el país andino-amazónico.
Respecto a la vacunación, informó que hasta el momento se administraron 12 millones 241 mil 351 dosis.
Precisó que en la semana precedente las aplicaciones del inmunizador ascendieron a 206 mil 296, y que en lo que va de año ese indicador ascendió a dos millones 412 mil 830 dosis.
El ministro enfatizó en que a pesar de la gran cantidad de enfermos registrados en esta cuarta oleada de la enfermedad, muy superior a los de las olas anteriores, Bolivia mantiene el índice de letalidad más bajo de toda la pandemia con un 0,6 por ciento.
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