Las presiones se han incrementado en la medida en que se acerca la fecha límite del 1 de mayo para reanudar los pagos de los préstamos federales a la comunidad estudiantil.
De acuerdo con medios locales, los defensores del alivio de la deuda argumentan que permitir que los pagos se reanuden antes de las elecciones de mitad de período podría reducir la participación de la base demócrata.
Así ocurriría especialmente porque el mandatario no ha sido capaz de cumplir con sus prioridades legislativas clave, como su programa económico Reconstruir Mejor (Build Back Better) y una nueva ley electoral, explicó la cadena nacional NBC News.
Los expertos coinciden en que tal decisión giraría la opinión pública a favor del ocupante de la Casa Blanca, en medio del desplome de su popularidad debido a la inflación que sigue afectando al país.
Permitir la reanudación de los pagos, argumentan algunos demócratas, podría suponer un coste político para el partido que se identifica con el color azul en el intento de defender sus escasas mayorías en la Cámara y el Senado.
La banda azul gana cuando los demócratas cumplen, dijo la representante Ayanna Pressley, demócrata de Massachusetts. «No extender la pausa en los pagos de los préstamos estudiantiles y cumplir su promesa de cancelar la deuda estudiantil sería inconcebible».
Encuestas e investigaciones demuestran, según los demócratas, que la decisión tendrá un impacto positivo entre los seguidores de esa fuerza política.
La Casa Blanca se muestra reacia a respaldar otra prórroga, pero está conscientes de que permitir que expire tan cerca de las elecciones de mitad de período podría ser contraproducente.
Un funcionario del gobierno federal dijo el viernes que Biden no tenía «decisión que adelantar todavía» sobre la pausa en los pagos, pero subrayó que los estadounidenses no han tenido que «pagar ni un solo centavo» en préstamos federales para estudiantes desde que él asumió el cargo.
El centro encuestador Data for Progress encontró el mes pasado que el 59 por ciento de los probables votantes apoyan la extensión del pago de la deuda hasta finales de año, mientras que solo el 33 por ciento se oponen.
Otra encuesta, realizada por el Centro de Crisis de la Deuda Estudiantil, también encontró que el 93 por ciento de los prestatarios dicen que no están preparados para reanudar los pagos el 1 de mayo.
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