En cualquier caso, Hizbulah nunca ha sido tan fuerte como lo es hoy, resumió, al advertir que “si Israel comienza una guerra contra Líbano, verá toda nuestra fuerza”.
La semana pasada un dron del ala armada del Partido de Dios sobrevoló durante 40 minutos y 70 kilómetros en la profundidad del espacio aéreo de Palestina ocupada y regresó íntegro a su base.
El régimen de Tel Aviv por la impotencia ante ese episodio, envió dos aviones de combate que volaron a baja altura sobre Beirut y sus suburbios.
Nasrallah enfatizó en que, “permanecer en silencio y entregar tus armas, emite un mensaje a tu oponente que estás aplastado y débil, y se, dijo, que nunca se compadecerá de ti y te humillará aún más, agregó.
Que nos den un ejemplo de pueblos que resistieron, entregaron sus armas y mantuvieron su dignidad”, puntualizó.
Los comentarios del jefe de la Resistencia islámica libanesa responden a demandas del Consejo de Cooperación del Golfo (Pérsico) respecto al desarme de Hizbulah para mejorar las relaciones con Líbano.
Esas solicitudes las entregó el canciller de Kuwait, Ahmed al-Nasser, quien expresó que se trataba de un mensaje de su país, del Golfo, árabe e internacional con medidas para otra vez generar confianza bilateral.
A su momento el ministro libanés de Relaciones Exteriores, Abdallah Bou Habib, aclaró que el Gobierno nunca desarmará a Hizbulah, un escudo ante la hostilidad y amenaza constante de Israel.
oda/arc