El abogado de la empresaria Karelim López, César Nakazaki, admitió que en ningún momento ha declarado sobre entrega alguna de dinero al mandatario ni ha presenciado alguna actuación ilícita del presidente.
Tampoco, dijo, ha tenido contacto personal con Castillo y solo “ha presentado un conjunto de líneas de negocios” de lo cual se puede deducir que hubo al menos anuencia del presidente.
Conforme a las precisiones de Nakazaki, el testimonio que López presentó ante la Fiscalía -a cambio de una pena menor por cargos de corrupción en su contra- proviene de confidencias y otros elementos conocidos en conversaciones con el ex secretario general de la Presidencia, Bruno Pacheco.
López es investigada por tres casos de posible corrupción, junto a Pacheco, quien tuvo que renunciar al cargo tras descubrir después la fiscalía encontró en un registro 20 mil dólares en efectivo en su oficina del palacio de gobierno.
Nakazaki refirió también que la denuncia se enfoca principalmente en una presunta estructura de corrupción con contratos de obras públicas en el Ministerio de Transportes y Comunicaciones, sobre lo cual dio información en un dispositivo de memoria electrónica que tomó de la oficina de Pacheco.
Representantes del bloque de partidos de extrema derecha que propugna la destitución de Castillo confían en obtener los votos 52 necesarios para debatir la moción de vacancia, lo que obligaría al mandatario a dar explicaciones al pleno, aunque no están seguros de lograr los 87 votos requeridos para vacarlo.
El jefe de Estado rechaza las afirmaciones de López relativizadas hoy por el abogado Nakazaki y denuncia un complot derechista para dar un golpe de Estado parlamentario, lo que se intenta desde el inicio de su gobierno, hace exactamente siete meses.
msm/mrs