Dicha institución, con sede en la ciudad de Kiel, agregó que se trata del mayor desplome desde el estallido de la crisis de la pandemia de la Covid-19 en la primavera de 2020.
La tendencia de recuperación de los recientes meses se interrumpió de manera brusca, señaló el informe de la entidad.
El economista del IfW, Vincent Stamer, señaló que aunque el conflicto entre Rusia y Ucrania no se intensificó hasta la última semana de febrero, la incertidumbre, sanciones y el aumento de los controles sobre las mercancías ya parecen tener un impacto duradero en el comercio.
Dijo que a mediados de febrero ya se vislumbraba un mes más débil y las sanciones contra Moscú refuerzan esta tendencia.
En referencia al comercio exterior alemán, la entidad comunicó que también espera descensos para febrero.
Especificó que en Alemania es probable las importaciones desciendan de forma inusitada con respecto a enero (-3,9 por ciento) y las exportaciones también disminuyan (-3,8 por ciento).
En el caso del conjunto de la Unión Europea (UE) argumentó el descenso de las importaciones (-1,6 por ciento) y de las exportaciones (-2,8 por ciento).
Por su parte, la Oficina Federal de Estadística (Destatis) notificó este lunes el aumento en enero de este año de 1,8 por ciento en cuanto a la cartera de pedidos a la industria alemana.
Este dato lo comparan con el mes precedente, mientras están atento al desenlace de la situación bélica en Ucrania y su impacto económico.
Destatis, con sede en la ciudad de Wiesbaden, señaló que la industria germana superó en 11,9 por ciento el nivel previo al estallido de la pandemia de la Covid-19, hace dos años. También, en comparación con enero del año pasado, los pedidos aumentaron 7,3 por ciento.
Según explicó la entidad, el aumento en enero se debió a los pedidos llegados del extranjero, ya que estos ascendieron 9,4 por ciento en comparación con diciembre. Asimismo, los reclamos procedentes de países de fuera de la eurozona crecieron 17 por ciento.
mgt/rfc