La vicepresidenta de la Unión Nacional de Juristas, Yamila González, subrayó las ventajas para las féminas de la isla que propone el documento en consulta popular respecto a la norma jurídica vigente desde 1975.
«El proyecto del Código habla de la distribución equitativa del trabajo doméstico, la protección al derecho de las mujeres a decidir sobre sus cuerpos, los derechos sexuales y reproductivos, reconoce las familias multiparentales, la gestación solidaria, aboga por la responsabilidad paterna, por citar ejemplos», comentó.
En su opinión, uno de los elementos fundamentales es la protección que brinda frente a la violencia familiar, en particular la violencia de género, una cuestión que transversaliza todo el texto.
Sobre este tema la profesora de la Universidad de La Habana, Clotilde Proveyer, calificó este proyecto como el código de la justicia.
«No solo define qué es la violencia hacia el interior de las familias, también describe las formas en las que se manifiesta esta violencia y sobre todo define la protección que el Estado a través de sus instituciones jurídicas está obligado a prestar en estos casos», señaló en el espacio televisivo Mesa Redonda.
La investigadora recordó que el documento reconoce a los niños, las niñas y los adolescentes como sujetos de derecho, lo cual vela por el bienestar superior de estos integrantes de las familias.
«La violencia tiene un carácter transgeneracional, funciona en espiral, es aprehendida», insistió Proveyer para llamar la atención sobre la importancia de frenar este comportamiento.
La experta citó datos de la Encuesta Nacional de Igualdad de Género de 2016 en la cual más del 20 por ciento de las mujeres reconoció haber sido víctima de violencia en algún momento de sus vidas.
Sin embargo, las cifras también reflejan que solo el 3,7 por ciento de ellas buscaron ayuda.
Proveyer subrayó que aunque Cuba no muestra datos preocupantes respecto a la violencia contra la mujer en comparación con otros países de la región, siempre ha existido la voluntad política y social de enfrentar estas situaciones.
El proyecto del Código de las Familias es analizado actualmente por unos siete millones de electores como parte de la consulta popular que se desarrolla en la isla hasta el 30 de abril próximo.
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