“Al fortalecer la base legal de la sociedad, estamos creando un mecanismo confiable para la protección de los valores primordiales, la memoria nacional y las tradiciones para las próximas generaciones”, expresó el mandatario según la agencia de noticias Belta.
Destacó que con la aprobación de los cambios constitucionales, los belarusos demostraron madurez cívica, además de compromiso con el desarrollo pacífico, creativo y próspero del país.
“Habiendo preservado los cimientos de un Estado soberano que garantiza la protección social de los ciudadanos, hemos mejorado la institución de la democracia y creado un sistema de gestión que responda a los desafíos de nuestro tiempo”, subrayó.
El presidente de la Comisión Electoral Central (CEC) de Belarús, Ígor Karpenko, declaró que el 82,86 por ciento de los votantes participantes en el referendo del pasado 27 de febrero estuvo a favor de las enmiendas constitucionales.
El alto funcionario indicó que cuatro millones 440 mil 813 de personas respaldaron la decisión del Estado de introducir los cambios legislativos que desde hace meses se vienen consultando, mientras 686 mil 165, el 12,6 por ciento de los asistentes a las urnas, no estuvieron de acuerdo.
En el referendo participó el 78,63 por ciento de los más de 6,8 millones de votantes inscritos, para quienes fueron abiertos cinco mil 510 colegios electorales. El 42,93 por ciento de los belarusos con posibilidad de votar ejercieron su derecho de manera anticipada.
Las cifras respaldan la obligatoriedad establecida por el país de que para aprobar modificaciones y complementaciones de la Constitución es necesario que la mayoría de los ciudadanos inscritos en el censo electoral este a favor.
El anteproyecto de la nueva carta magna fue redactado por una Comisión Constitucional que comenzó su labor en marzo de 2021 y, entre varios puntos, las enmiendas prevén la limitación a dos mandatos consecutivos de cinco años la permanencia en el cargo de presidente.
También establecen que ningún exmandatario será procesado por las acciones relacionadas con el ejercicio de sus funciones.
Otros cambios están relacionados con la preservación de la identidad y la soberanía nacional, las tradiciones culturales y espirituales; y con la protección de la verdad histórica, la memoria de la Gran Guerra Patria y el heroísmo del pueblo, así como la enseñanza de los ideales patrióticos.
Las propuestas aprobadas proponen aumentar las condiciones informáticas que permitan proteger los datos personales y la garantía de la seguridad de la persona y la sociedad en su uso, así como la exclusión de la agresión militar del país contra otros, lo que otorgaría a Belarús el estatuto de Estado con una política exterior pacífica.
Otra enmienda promueve el fortalecimiento de la responsabilidad del Estado en el desarrollo de la energía nuclear pacífica, así como en garantizar la seguridad en su producción y uso. acl/mml