En su cuenta oficial de Twitter, el demócrata afirmó que los precios del combustible están bajando, por lo que el valor de la gasolina también debería hacerlo.
La última vez que el petróleo estaba a 96 dólares el barril, la gasolina costaba 3,62 dólares el galón. Ahora está a 4,31 dólares, escribió y agregó que las compañías no deberían aumentar sus beneficios a costa de los estadounidenses.
El tuit de Biden ocurrió una semana después de que el precio medio de la gasolina en Estados Unidos alcanzara el punto más alto jamás registrado y el crudo se elevara a su cifra máxima en 14 años.
De acuerdo con la publicación The Hill, los precios de la gasolina se determinan por factores ajenos al control de la Casa Blanca, pero el incremento ha ido acompañado con el desplome de los índices de aprobación del presidente.
A inicios de la pandemia en el 2020, el valor de la gasolina cayó en picada, pero se disparó delante de la oferta cuando se levantaron las restricciones de la Covid-19 un año después.
La semana pasada, Biden anunció la prohibición de las importaciones de petróleo ruso en medio de las tensiones en Europa del Este, lo que provocó las subidas del precio del gas.
A pesar del llamamiento del ocupante de la Casa Blanca, expertos aseguran que la disminución de los costos del gas suele ocurrir después del descenso del precio del petróleo, en parte debido al tiempo que tarda la nueva oferta en pasar por la cadena de suministro.
Patrick De Haan, jefe de análisis de petróleo de GasBuddy, predijo en Twitter que la bajada se traduciría probablemente en un cierto alivio para los consumidores en los próximos días.
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