Al mismo tiempo, el Ejecutivo decretó un aumento del sueldo mínimo mensual, de 930 a mil 025 soles (270 dólares) ante una ola alcista que, sumada con las huelgas de transportistas y agricultores, desató fuertes protestas en la ciudad centroandina de Huancayo.
La exoneración tributaria fue ofrecida ayer en Huancayo por un equipo de ministros en una accidentada negociación, en medio de disturbios que dejaron un saldo de 15 civiles y policías lesionados, por el intento de los manifestantes de ingresar a un coliseo deportivo escenario de las conversaciones.
El presidente Castillo afirmó que la exoneración tributaria a los combustibles no solo atenderá la demanda de los transportistas en huelga desde el pasado lunes, sino que evitará el aumento de precios de alimentos y otros productos básicos que afecta a las familias.
El mandatario recordó además que el alza de los combustibles no es culpa del Gobierno y se debe a factores externos y señaló que la política económica vigente le impide controlar los precios.
“Pido a los hermanos transportistas y agricultores trabajar juntos por el desarrollo del país en beneficio de todos”, dijo y afirmó que el Gobierno siempre estará al lado del pueblo, en aras de la paz social y el bienestar general.
La comisión de ministros que ayer obtuvo a duras penas una tregua de cinco días, tras fuertes discusiones con los dirigentes transportistas y agrarios, ofrecio también eliminar el impuesto general a las ventas de pollo, arroz, harina de trigo y fideos.
Entretanto, el ministro de Comercio Exterior, Roberto Sánchez, declaró que los bloqueos de carreteras están levantándose en todo el país, calificó como rumores las versiones que anuncian protestas como la de Huancayo en otras ciudades y pidió calma a la población.
mem/mrs