Todos los estadounidenses pueden sentirse muy orgullosos. Hemos recorrido un largo camino para perfeccionar nuestra unión, dijo Jackson, quien se convirtió en la primera mujer negra en llegar al máximo órgano de justicia del norteño país.
En mi familia, hizo falta toda una generación para pasar de la segregación al Tribunal Supremo de Estados Unidos, agregó.
Durante el acto televisado y difundido por las redes sociales, la jueza aseguró ser la esperanza y el sueño del esclavo, citando a Maya Angelou, una escritora, poeta, cantante y activista por los derechos civiles estadounidense.
Tras su confirmación por el Senado este jueves, Jackson también se convirtió en la primera defensora pública que asciende al alto tribunal y su juramento marca la primera vez en la historia de esta nación que los blancos no son mayoría en ese órgano.
«Han tenido que pasar 232 años y 115 nombramientos previos para que una mujer negra sea seleccionada para formar parte del Tribunal Supremo. Pero lo hemos conseguido, todos juntos», dijo entre los aplausos del público.
Me siento a la altura de la tarea sobre todo porque sé que no estoy sola, que me apoyo en los hombros de mis propios modelos de conducta, expresó.
Desde el jardín sur de la Casa Blanca, concluyó que lleva como paradigma a aquellas generaciones de estadounidenses que nunca tuvieron nada parecido a esta oportunidad, pero que trabajaban día y noche movidos por el sueño de lograr lo imposible.
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