Opiniones de guías del Ministerio de Turismo (Mintur) de esta nación refieren esos criterios a partir de las encuestas realizadas a quienes visitan esta nación en plan de vacaciones.
Cayo Santa María significa belleza y aventuras, relatan. Paisaje con una infraestructura adecuada y una culinaria que resalta las recetas de la tradición criolla, también incluye seguridad en cuanto a la situación sanitaria relacionada con la Covid-19.
Un sitio sumamente paradisíaco, con conservación del medio ambiente, y una estructura hotelera y de servicios que sorprende a los más exigentes, en la combinación perfecta de paisaje y comodidades, impulso adicional de una náutica recreativa de altos quilates.
Se trata de un islote de arenas blancas y aguas sumamente limpias, característica que acompaña a otros cayos, no menos famosos, de su derredor como es el caso de Ensenachos y Las Brujas, sugestivos nombres capaces de atraer al más escéptico.
Para llegar al lugar, la manera ideal es a través de un camino sobre las aguas conocido por los cubanos como Pedraplén, de 48 kilómetros, que parte del poblado de Caibarién en el norte de la central provincia de Villa Clara.
Por si fuera poco, la otra novedad que acumulan estos lugares está en que son los tres únicos islotes cubanos unidos entre sí por viales.
Además del disfrute que propone el sol y la playa son sitios ideales para el buceo, el snorkeling, paseos en yate y otras excursiones, pues las autoridades turísticas de esa zona proponen a los viajeros más de 30 opciones recreativas de diferente tipo.
Desde la bahía de Buenavista el paisaje es sorprendente, lugar considerado Refugio de Fauna con varias especies endémicas, contada la Jutía rata. Esa bahía limita con una amplia barrera coralina y por ese entorno se puede llegar a 500 cayuelos.
En particular, Cayo Santa María, cuenta con 13 kilómetros de largo y dos de ancho, para transformarlo en el más importante del grupo geográfico, con 18 kilómetros cuadrados, conocido como La Rosa Blanca de los Jardines del Rey.
Sus playas alcanzan 11 kilómetros, con nombres significativos como Perla Blanca, Las Caletas, Cañón y Cuatro Punta.
Un escenario muy reclamado por viajeros de todo el mundo, sobre todo ahora, de cara a la reapertura turística de este país desde el 15 de noviembre pasado, y que ya lleva la atención de buena cantidad de agencias de viajes y turoperadores globales.
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