Las autoridades levantaron algunas órdenes de evacuación de una comunidad localizada en las montañas del sur del estado, donde fueron destruidas más de 200 casas.
De acuerdo con la prensa local, las órdenes de evacuación levantadas abarcaban alrededor del 60 por ciento de las cuatro mil 500 personas que se estima debían abandonar sus hogares desde que comenzó el incendio, el pasado martes.
El comandante de casos de incendios del territorio, Dave Bales, dijo que los equipos trabajaron para evitar que el siniestro continuara ganando fuerzas, y poner fuera de peligro a la mayoría de los residentes desplazados.
Aunque las llamas no están contenidas, Bales expresó sentir satisfacción con el trabajo realizado hasta ahora y las perspectivas para los próximos días.
De acuerdo con las autoridades locales, se espera que las condiciones climáticas ayuden a sofocar las llamas debido a la reducción del viento y el aumento de la humedad.
La portavoz del pueblo de Ruidoso, Kerry Gladden, explicó que las órdenes de evacuación que permanecen en vigor podrían ser levantadas en los próximos días.
El incendio y los vientos que lo propagaron derribaron las líneas eléctricas y dejaron sin electricidad a 18 mil clientes.
Según el gerente de la compañía Public Service Co., Wilson Guinn, el servicio se ha restablecido para todos los afectados, excepto para unas pocas docenas.
Se le hizo un llamado a las personas que comienzan a regresar a sus hogares a ser precavidas y llamar a los funcionarios de la empresa de servicios públicos si encuentran líneas caídas.
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