Los cambios reflejarán normas de seguridad más precisas y disposiciones para revocar rápidamente las licencias comerciales luego del accidente que se teme cobró 26 vidas, destacó este sábado el rotativo Asahi Shimbun.
Aunque las empresas deben obtener la aprobación de dicho ministerio antes de comenzar a operar, los funcionarios admitieron que las reglas para eliminar a aquellos que no mantienen altos estándares de seguridad pueden ser demasiado flexibles.
Las sesiones de capacitación para garantizar que los capitanes de los barcos y los miembros de la tripulación tengan las habilidades adecuadas para operar las embarcaciones se encuentran entre los pasos de seguridad reforzados que se contemplan, según fuentes gubernamentales.
Otra disposición evaluaría si los operadores son plenamente conscientes de la necesidad primordial de seguridad, por ejemplo, garantizando que el equipo de seguridad se mantenga en óptimas condiciones en todo momento.
También se están considerando medidas disciplinarias más estrictas para permitir que el ministerio cierre rápidamente las empresas que no cumplan.
Los funcionarios del Ministerio de Transporte explicaron que se necesitaba una supervisión más estricta porque los operadores de embarcaciones de recreo no estaban sujetos a las mismas condiciones severass que deben acatar las empresas de autobuses fletados.
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