El alto representante de la Unión Europea (UE) para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, arribó procedente de Chile, donde ante la prensa declaró que prepara el respaldo necesario para un nuevo paquete de sanciones contra Rusia por el conflicto bélico con Ucrania.
En el aeropuerto internacional de Tocumen, Borrell fue recibido por la vicecanciller panameña Marta Gordón y el embajador de UE en el istmo, Leo Clark Hoornert, y mañana sostendrá conversaciones oficiales con el presidente de la República, Laurentino Cortizo; y su par anfitriona, Erika Mouynes.
El martes, el visitante asistirá a una cita de cancilleres y autoridades de naciones miembros del Sistema de Integración Centroamericana, cuya presidencia pro tempore ocupa Panamá, y de la Comunidad del Caribe, para buscar una posición común, según la propia Mouynes sobre el impacto en la región de la crisis entre Kiev y Moscú.
El objetivo también es formular una propuesta de mitigación conjunta, de acuerdo con una nota diplomática.
El comunicado de la cancillería indica que en el análisis en el que espera asistan representaciones de 18 países se hará a partir del auge de los precios del petróleo y sus derivados, el encarecimiento de la cadena de distribución de alimentos y el impacto en el medio ambiente.
Al final del encuentro, se emitirá una declaración conjunta que será dada a conocer a la prensa acreditada nacional y extranjera.
Organizaciones sociales como el Frente Nacional por la Defensa de los Derechos Económicos y Sociales rechazan la estadía de Borrell, a quien catalogan promotor del nazifascismo en el mundo, por su apoyo a políticas guerreritas de la OTAN en Europa y otras partes del planeta.
Uno de los activistas del Frente, Ronaldo Ruiz, recordó en declaraciones a Prensa Latina que Borrell declaró públicamente que las guerras son necesarias, sin medir las consecuencias para los pueblos.
Su estadía, dijo, es continuidad de la del secretario norteamericano de Estado, Antony Blinken, en abril último, con el fin de alinear el traspatio continental a sus intereses intervencionistas.
El analista José Didimo, de El Periódico de Panamá, señaló que el vicepresidente de la Comisión Europea se ha convertido en garrotero y justificador de las andanzas de la OTAN que antes criticó.
A juicio del estudioso, detrás de Blinken parece que Borrell «viene a remachar los clavos del fardo que quieren que carguemos con alegría, producto de su conflicto con Rusia escenificado en Ucrania y que fue el resultado de un plan por cercarla, extendiendo los dominios de la OTAN y ponerle misiles nucleares en las fronteras”.
En el caso del istmo, opinó Didimo, a pesar de todo lo hecho por Europa para desprestigiar a esta nación a través de Panamá Papers, y colocarlo en listas grises para destruir su Centro Financiero Internacional, ahora se aparecen, tras causar severos daños a la economía y a la imagen país que los panameños se enfrenten a Rusia y a China, luego de dinamitar la neutralidad del Canal.
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