La ligera mejoría en la situación actual responde a los efectos de diversas políticas, a la vez que se adoptan todas las medidas posibles contra la pandemia de la Covid-19 y las actividades económicas y sociales avanzan hacia la normalidad, precisó el informe económico de abril presentado por el gabinete nipón.
Asimismo, el texto destacó que es necesario prestar mucha atención a los riesgos a la baja debido al aumento de los precios de las materias primas, las fluctuaciones de los mercados financieros y de capitales, las limitaciones de suministro, así como el impacto de las infecciones por el coronavirus SARS-Cov-2 y sus variantes.
El balance oficial reveló que en el primer trimestre de 2022 el gasto personal promedio de los japoneses se mantuvo estable a pesar del estado de cuasi emergencia sanitaria, por lo que se espera una mejora de este indicador ahora que prácticamente no existen restricciones.
También disminuyó un poco la tasa de desempleo y aumentaron las ofertas de trabajo en los sectores industrial y de hostelería.
Sin embargo, durante el pasado mes se mantuvo la tendencia alcista de los precios al consumidor, hasta un 2,1 por ciento más que en el mismo periodo de 2021.
En cuanto a los planes inversionistas, el gobierno japonés estima un crecimiento interanual grande en la industria del software, contrario a lo que ocurrirá en otras ramas como transporte, correo o comercio mayorista y minorista, los cuales quizás experimenten un descenso de capital.
La producción nacional avanza a un ritmo moderado, sobre todo la relacionada con maquinarias, componentes y dispositivos electrónicos.
Este resultado positivo mantuvo estable las principales exportaciones del país, en medio de un contexto de recuperación que involucra además los pormenores de las economías de Estados Unidos, China y la Unión Europea, destacó el informe.
Por otro lado, la confianza y los beneficios del empresariado permanecen estancados con los peores marcadores en los sectores manufacturero, comercialización de alimentos y turismo, los cuales enfrentan los estragos de la crisis pandémica y el alza de los precios en el mercado global.
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