Aparecen en la boleta sendas fotos de la fórmula presidencial del Pacto Histórico, integrada por Gustavo Petro y Francia Márquez; y la de la Liga Anticorrupción Rodolfo Hernández y Marelen Castillo, además de una tercera casilla para el voto en blanco.
Las imágenes tienen el mismo orden y número de la tarjeta de la primera vuelta, tal como establece el artículo 6 de la ley 163 de 1994.
En los comicios del domingo pasado Petro y Márquez alcanzaron ocho millones 541 mil 617 votos (40,32 por ciento) y Hernández y Castillo cinco millones 965 mil 335 (28,15 por ciento).
Las fuerzas alternativas y de izquierda en Colombia obtuvieron una cifra de sufragios sin precedentes en la historia del país, pero no llegaron al 50 por ciento más un un voto para ganar en la primera vuelta.
Petro y Hernández tienen poco más de dos semanas para cautivar a los votantes hacia su respectivo proyecto político con el objetivo de alcanzar la Casa de Nariño.
El candidato de la Liga Anticorrupción está en juicio, imputado por interés indebido en la celebración de contratos para un millonario contrato público para el manejo de las basuras en Bucaramanga y la Procuraduría lo tiene en juicio disciplinario.
En 2020 la Fiscalía imputó al candidato por presunto interés indebido en el millonario negocio para favorecerse a sí mismo, a terceros y encima haber influido a otros para que cometieran delitos.
Según el diario local La Silla Vacía, sí hay pruebas que incriminan a Hernández en un entramado en el que su hijo Luis Carlos Hernández aspiraba a recibir una coima de una unión temporal llamada Vitalogic de alrededor de 1,5 millones de dólares, relacionada con el contrato citado.
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