El texto de la bancada congresal del vanza Papartido Aís, plantea reducir el requisito de dos tercios de votos del total de 130 legisladores (87), alta valla establecida en el marco de las previsiones de equilibrio entre el Ejecutivo y el Legislativo.
La nueva cifra sería 78, cifra más accesible, aunque la legisladora Patricia Chirinos, también de Avanza País, y promotora del primer intento de vacancia, fracasada como la segunda, lleva una minuciosa cuenta y dijo que actualmente hay 75 votos seguros.
El proyecto presentado por los congresistas Norma Yarrow, Rosselli Amuruz y Diego Bazán, fue precedido por la propuesta del legislador William Elera, de convocar a un pleno congresal que, por encontrarse el Congreso en receso, requiere, coincidentemente, de las firmas de 78 parlamentarios.
Elera, sin embargo opina que la ley propuesta tendría nombre propio, por estar concebida para defenestrar a Pedro Castillo, y plantea en cambio un proceso parlamentario por infracciones constitucionales que se imputan al gobernante.
La sanción por ese cargo es la suspensión del infractor o su inhabilitación hasta por 10 años para ejercer cargos en el aparato estatal y el proceso, según el congresista, se realizaría durante aproximadamente un mes y medio.
Los afanes de destituir a Castillo son motivados por acusaciones del exministro del Interior Mariano González, quien sostiene, sin pruebas plenas, que el jefe de Estado tiene compromisos con la corrupción y obstaculiza la búsqueda de exfuncionarios del entorno de Castillo indagados por corrupción y prófugos.
El primer ministro, Aníbal Torres, negó las acusaciones y señaló que carecen de sustento, a tiempo de reiterar la versión oficial de que González fue cesado por no cumplir su trabajo y no mantener comunicación con el Gobierno.
El retiro de Castillo, por renuncia, es objetivo de una vasta campaña mediática, política y empresarial, así como de organizaciones no gubernamentales.
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