Tras una votación efectuada durante la víspera en una región tradicionalmente conservadora, la población patentizó su respaldo a la interrupción voluntaria del embarazo con un margen de 59 contra 41 después del 95 por ciento de los votos contados, refirió el periódico The Kansas City Star.
Previo al referéndum, analistas advirtieron que los resultados arrojarían una imagen del sentimiento popular frente a la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos de revocar la sentencia del caso Roe vs. Wade en 1973, y bajo el cual quedó protegido el derecho al aborto en todo el país.
Asimismo, se trata del primer estado en el que los votantes acuden a las urnas en relación al tema, a escasos tres meses de la celebración de las elecciones intermedias.
La decisión de mantener el aborto como un derecho fue abrumadora en una región donde los republicanos registrados superan con creces a los demócratas, reseñó por su parte The New York Times, y pese a la inconformidad de algunos votantes que consideraron confuso el diseño de la boleta.
Esto, debido a que los electores debían decir no en caso de querer mantener el derecho, y sí en caso de decantarse por la introducción de reformas que limitarían la práctica del procedimiento.
Aún cuando no se descarta la introducción por parte de algunos legisladores de determinadas normas restrictivas, en Kansas los abortos de hasta 22 semanas seguirán siendo legales.
La votación adquirió mayor importancia debido a la ubicación del estado, que colinda con territorios donde la interrupción del embarazo ya está prohibida en casi todos los casos.
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