Sunak, quien según las encuestas marcha muy por detrás de Truss en la intención de voto de los 160 mil afiliados al partido tory que elegirán al sustituto de Johnson, obtuvo el respaldo mayoritario de los correligionarios presentes anoche en el estudio de la televisora Sky News.
Al finalizar el encendido debate en el que ambos candidatos se dedicaron a exponer los planes que aplicarían para atajar la galopante inflación y la crisis del costo de la vida, la mayoría de los asistentes votó a mano alzada por el exministro de Hacienda.
El exfuncionario, cuya renuncia el gabinete de gobierno precipitó la caída de Johnson el 7 de julio pasado, dedicó buena parte de su tiempo a descalificar las políticas fiscales y económicas de su rival.
Según Sunak, a quien sus detractores acusan de haber apuñalado a su antiguo jefe, de llegar al despacho del número 10 de Downing Street, lo primero que haría es tratar de controlar la tasa inflacionaria, en lugar de recortar los impuestos, como propone Truss.
No es la carga fiscal lo que está provocando la recesión, es la inflación, esa es la raíz del problema, aseveró el exministro, tras alertar que la propuesta de su contendiente echaría más gasolina al fuego de la espiral inflacionaria, que según pronosticó el Banco de Inglaterra podría llegar al 13,3 por ciento en octubre.
Al igual que en debates anteriores, ambos candidatos aseguraron que mantendrían las sanciones impuestas por Londres a Rusia por la guerra en Ucrania.
Los 160 mil afiliados al Partido Conservador, que representan apenas el 0,03 por ciento del electorado británico, tendrán hasta el 2 de septiembre para votar por correo postal o electrónico.
El nombre del ganador se anunciará tres días después, cuando el Parlamento reanude sus labores legislativas después del receso de verano.
Según una encuesta de la empresa YouGov publicada antes del debate de anoche, Truss tendría el respaldo del 60 por ciento de sus correligionarios para convertirse en la nueva líder del partido y primera ministra del Reino Unido.
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