Una información de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades refirió que hasta la fecha los territorios más afectados son Nueva York (mil 960), California (mil 310) y Florida, con 936.
En días recientes la viruela del mono fue declarada emergencia en el país norteamericano donde, alertaron medios de prensa, las existencias de inmunizantes son insuficientes.
El gobierno de Estados Unidos distribuye menos de un tercio de las tres millones 500 mil dosis de vacunas contra la enfermedad que se estiman como necesarias para combatir el brote, informó en horas recientes un artículo en The New York Times.
La escasez, explicó, se debió en parte a que el Departamento de Salud y Servicios Humanos no solicitó desde el principio el embotellado de las existencias a granel del fármaco, ya disponible para su distribución.
Para hacer frente a la situación, el comisionado de la Administración de Drogas y Alimentos, Robert Califf, afirmó que se valora estirar el suministro limitado de inmunógenos mediante el cambio en la forma de administrar las inyecciones.
El funcionario describió que en vez de inocular dosis del inmunizante Jynneos por vía subcutánea, una forma tradicional de poner vacunas en el tejido adiposo debajo de la piel, las dosis se inyectarían debajo de la capa superior de la piel.
Este enfoque, conocido como inyección intradérmica, utiliza una aguja más delgada y menos producto, pero hace que se forme una pequeña burbuja.
Michael Osterholm, director del Centro de Investigación y Políticas de Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Minnesota, declaró que le preocupaba la protección inmunológica proporcionada por la estrategia, en particular para las personas con problemas de salud como el Virus de Inmunodeficiencia Humana.
«Todavía no tenemos los datos para saber con qué eficacia una vacuna administrada por vía intradérmica protegerá a las personas inmunocomprometidas», dijo.
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