“Hasta el momento estamos muy satisfechos, hemos tenido mucha acogida del transporte privado y público; estamos en alrededor de las 8 mil conversiones, esperamos terminar hasta fin de año con unas 15 mil”, afirmó el jefe de la Unidad Operativa de la EEC-GNV, Pavel Salinas, en declaraciones a la red RTP.
Subrayó el líder tecnológico que el proyecto de conversión resulta un estímulo a la reactivación económica del país andino-amazónico.
Tras dar a conocer en mayo del año en curso un programa para realizar esta conversión de los vehículos sobre la base del GNV con equipos de quinta generación o inyección secuencial, la unidad ejecutora reporta los avances.
Este tipo de transformación es un beneficio gratuito ofrecido por el Gobierno a través de la EEC-GNV, el cual consiste en la dotación de un cilindro (recipiente para el GNV), el kit de inyección secuencial o conjunto de componentes adaptables al motor para que funcione a GNV, más el costo de la mano de obra especializada para ejecutar esta labor.
Según el Ministerio de Hidrocarburos y Energías, el año pasado se ejecutaron 10 mil 995 conversiones de medios de transporte a GNV a escala nacional, 33 mil 456 recalificaciones de cilindros para GNV y 31 mil 442 servicios de mantenimiento de equipos con este tipo de adaptación tecnológica.
Todo esto es parte del proceso de cambio de matriz tecnológica que las autoridades de Bolivia promueven hoy.
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