En las sesiones con sede en la provincia Coclé, con la Iglesia católica como facilitadora, donde se retomó el tema, los colectivos fustigaron la falta de voluntad política del Ejecutivo de reducir los altos precios de la tarifa eléctrica, debido a sus compromisos con oligopolios y el empresariado privado que controlan el sector.
Sobre el tema, uno de los voceros de los colectivos, Jorge Guzmán, indico que en estas conversaciones que son trasmitidas a toda la población por cadena de radio y televisión, los técnicos han demostrado que el país tiene potencialidades para generar energía barata y sana, sin que el Estado recurra a millonarios desembolosos en subsidio.
La energía que se vende en Panamá es la más cara en la región, lo que también se evidenció en el debate, precisó, además de las denuncias de implicaciones del Gobierno en casos de corrupción, el mal de fondo de todos los problemas de los panameños.
Guzmán aseveró que la única opción para resolver las diferencias es que el pueblo sea poder para hacer justicia y darle aa la nación vida digna.
Por su parte, otro de los líderes de la alianza Pueblo Unido por la Vida y secretario general del Sindicato de los Trabajadores de la Construcción, Saúl Méndez, afirmó que el Ejecutivo no tiene la más mínima intención de rebajar la tarifa eléctrica y descartó la opción de ir a una comisión para escuchar más de lo mismo.
Frente a ello, vaticinó, al pueblo no le queda otra opción que volver a las calles como hizo hace un mes para que se dieran medidas inmediatas necesarias de rebaja del combustible y llevar a 72 los productos de la canasta básica familiar con precios asequibles y controlados, que aún el Ejecutivo debe presentar.
Luego de cuatro días de análisis y debate sobre el mercado del servicio eléctrico, este domingo las partes acordaron al disenso en las vías para reducir la tarifa.
Los movimientos populares cuestionaron de manera enfática las opciones dadas en las pláticas por el secretario nacional de Energía, Jorge Rivera, sobre la calidad del servicio y la creación de otra comisión para evaluar el asunto, que consideraron insuficientes y dilatadoras.
La mesa única de dialogo acordó continuar las sesiones el miércoles de la próxima semana y comenzar con el punto de la Caja de Seguridad Social, aún pendiente, para luego debatir sobre transparencia y corrupción.
Mientras, los grupos sociales anunciaron para el jueves próximo una marcha hacia la presidencia de la República, para reclamar al Gobierno que escuche al pueblo y cumpla con los acuerdos de las negociaciones en Coclé.
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