Gavidia renunció en medio de una campaña política y mediática contra el mandatario que presiona y busca medidas para retirarlo del cargo, invocando las graves acusaciones de presunta corrupción materia de cinco investigaciones del Ministerio Público
Subrayó el hecho de que su dimisión no se debe a discrepancias políticas con el mandatario, en cuya defensa era uno de los ministros que más destacaba en la defensa de Castillo frente a los afanes de poner fin al mandato del jefe de Estado.
Agradeció a Castillo por la confianza otorgada y dijo que sigue dispuesto a seguir trabajando por el país donde se le requiera. “Todo comienza y todo termina, no hay otra razón”, declaró el ministro al llegar al Palacio de Gobierno a participar por última vez en la sesión semanal del Consejo de Ministro.
Desestimó así conjeturas sobre los motivos de su renuncia, que se refieren a las investigaciones abiertas por acusaciones de la oposición de que fue acompañado por sus dos hijas en un viaje aéreo oficial al interior y que su esposa, de la que está separado, trabajaba desde 2022 en un ministerio, lo cual está prohibido por ley.
El congresista de extrema derecha Héctor Venturo sostuvo que Gavidia debió renunciar antes, por las citadas denuncias, sobre las cuales el ministro dijo que los temas, en los que anteriormente negó ilegalidades, son materia de investigación.
Venturo lo acusó de “abandonar el barco” cuando fuerzas de élite atacan desde hace varios días el principal campamento de remanentes de un grupo armado que opera en un intrincado territorio del centro del país, operación que habría terminado.
En su carta de renuncia, Gavidia consignó lo que considera logros de su labor ministerial, como la mejora de las condiciones de oficiales y tropas, las acciones de ayuda en emergencias y el avance del proyecto de un satélite de comunicaciones para uso general.
Por los frecuentes relevos, la administración de Castillo ha tenido aproximadamente 50 ministros, desde su inicio, hace poco más de un año.
Entretanto, el tabloide Perú.21, de oposición constante al Gobierno, afirmó que, según un informe del Ejército, helicópteros militares realizaron, a pedido de la Presidencia de la República, diez vuelos a Puña, localidad de la región norandina de Cajamarca, donde viven los padres del presidente Castillo.
Al respecto, el congresista de extrema derecha Alejandro Muñante dijo que ha pedido a la Procuradoría del Estado que verifique el caso, en el cual puede haberse cometido delito de peculado de uso de bienes del Estado con fines personales.
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