Lo mismo el expresidente Donald Trump (2017-2021), que eligió este territorio para dar hoy su primer mitin con vistas a los comicios venideros, como el actual ocupante del Despacho Oval, Joe Biden, que hace pocos días pronunció un discurso en la Universidad de Wilkes, buscan apuntalar allí a sus correligionarios.
“La aparición de ambos en una fecha cercana al Día del Trabajo (primer lunes de septiembre) no solo dice que Pensilvania es un campo de batalla en 2022, sino que es un campo de batalla en 2024”, estimó Celinda Lake, encuestadora de la campaña presidencial de Biden para 2020, citada por el periódico Politico.
Por su parte, David Urban, un estratega republicano residente en Pensilvania cuando se desempeñó como asesor principal de la campaña de Trump en 2016, calificó los eventos de duelo como “un pequeño presagio mano a mano”.
Acorde con la fuente noticiosa, las ansiedades del Partido Republicano en Pensilvania se concentran fundamentalmente en Mehmet Oz, un médico que ganó la nominación al Senado por menos de mil votos después de un respaldo decisivo de Trump y que ahora, según previsiones, marcha detrás del vicegobernador demócrata John Fetterman.
Otro tanto ocurre con Doug Mastriano, abundó el reporte, pues actualmente es el segundo candidato conservador a gobernador peor posicionado en los estados principales, con evidente rezago frente al fiscal general de Pensilvania, el demócrata Josh Shapiro, por aproximadamente siete puntos.
El rotativo indicó igualmente que, en caso de que los preferidos del magnate no logren el respaldo suficiente, además de sucumbir ante los azules, su protectorado levantaría nuevos cuestionamientos dentro de su propia organización partidista.
Según señaló una fuente al medio, una derrota crearía una oportunidad para que sus oponentes en los primeros estados de las primarias argumenten cómo el partido sufrió debido a sus decisiones egoístas.
El hecho de que (Trump) se haya concentrado en el estado indeciso para el fin de semana políticamente simbólico del Día del Trabajo, el inicio no oficial de las elecciones intermedias, demuestra cuán fundamental es Pensilvania para su éxito este año y, lo más probable, para una futura campaña presidencial, acotó el artículo.
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