En la declaración final de la Conferencia Ministerial de Asia y el Pacífico sobre la Reducción del Riesgo de Desastres, que se efectuó del 19 al 22 de septiembre, los firmantes coincidieron en la importancia de la guía que representa el acuerdo Marco de Sendai para el logro de resultados alentadores y como facilitador de la Agenda 2030 para el desarrollo sostenible.
Manifestaron su preocupación por las peligrosas tendencias de los desastres y su impacto en los países con menor desarrollo, por lo que exhortaron a la comunidad científica, la academia, la sociedad civil y el sector privado a unirse a los gobiernos para aumentar la resiliencia de las comunidades.
Es preciso un enfoque más holístico basado en la ciencia, la tecnología y la innovación de conjunto con el conocimiento y experiencias local, indígena y tradicional, resaltaron.
También llamaron a desterrar la discriminación sistémica y la desigualdad por considerarlas barreras en el trabajo en pos de la protección de las poblaciones.
Al respecto, resaltaron la necesidad de una labor transformadora e inclusiva basada en los derechos humanos, y que, además, promueva y apoye la participación y liderazgo de mujeres, jóvenes, personas con discapacidad, Lgbtqt+, de las minorías étnicas y los adultos mayores. Instaron a los gobiernos a asegurar la incorporación de las capacidades, las redes, los recursos y los conocimientos de todas las personas en la planificación, la toma de decisiones e implementación de iniciativas de reducción del riesgo.
Asimismo, ratificaron la importancia de proteger a las pequeñas y medianas empresas mediante alianzas con los gobiernos centrales y locales y el sector privado.
Pidieron también que se compartan las lecciones identificadas en las respuestas nacionales a la pandemia de la Covid-19 y trabajar por la seguridad alimentaria con el apoyo a prácticas agrícolas resilientes y en las cadenas de suministro de alimentos duraderos.
mem/lrd