Miles de personas se manifestaron en Petion Ville, al sudeste de Puerto Príncipe, para criticar la gestión de Henry, a quien responsabilizan por la precaria situación del país.
Se registraron enfrentamientos entre los inconformes y la policía que utilizó gases lacrimógenos y munición real para dispersar a la multitudinaria movilización.
Medios de prensa aseguraron que hasta cuatro personas tuvieron que ser trasladadas de urgencia a los centros de salud cercanos, mientras que los manifestantes en represalia atacaron los locales de la antigua dirección general de la Policía.
Además de Puerto Príncipe también se registraron protestas en Cabo Haitiano, en el extremo norte del país, contra la inseguridad, aumento de los precios y la falta de disponibilidad de combustible en el mercado, además que reclamaron la dimisión del jefe de Gobierno.
En el transcurso de la movilización saquearon una tienda de Valerio Canez y tuvieron que intervenir las fuerzas del orden.
Igualmente, cientos de ciudadanos salieron a las calles de Gonaïves, al noroeste de esta capital, levantaron barricadas en llamas en varias calles del centro de la ciudad y reclamaron la salida del primer ministro.
Las protestas se intensificaron en Haití desde el anuncio del Gobierno del retiro del subsidio a los combustibles, lo cual automáticamente duplicó el precio de la gasolina y aumentó en un 89 por ciento el gasóleo cuando el país ya enfrentaba una aguda crisis económica.
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