Kwarteng tenía previsto asistir hoy en Washington a la clausura de la reunión anual del Fondo Monetario Internacional (FMI).
Una fuente anónima de la delegación británica citada por la televisora Sky News negó que el regreso intempestivo del titular de Hacienda sea una señal de pánico, e insistió en que se trata de una reunión del gabinete para abordar el plan fiscal semestral del Gobierno.
El llamado “minipresupuesto” anunciado por Kwarteng el 23 de septiembre pasado incluye una histórica rebaja de impuestos, valorada en 45 mil millones de libras esterlinas (casi 50 mil millones de dólares).
La falta de detalles sobre la forma en que el Gobierno pretende financiar su estrategia para estimular el crecimiento económico y frenar la inflación y el paquete de ayuda energética para el sector residencial y las empresas, desestabilizó el mercado financiero.
La desconfianza de los inversionistas por el temor de que el plan fiscal dispare la deuda pública provocó una caída temporal de la libra esterlina, que obligó al Banco de Inglaterra a comprar los bonos del Estado para apuntalar a la divisa británica.
Esas compras de emergencia, sin embargo, finalizan este viernes, por lo que no se descarta un nuevo desplome de la libra, en medio de crecientes presiones sobre la primera ministra Liz Truss, quien lleva poco más de un mes en el cargo, para que dé marcha atrás al polémico mini presupuesto.
La semana pasada, Truss decidió revertir su propuesta de reducir del 45 por ciento al 40 por ciento el tope del impuesto sobre la renta para las personas de mayores ingresos, y luego adelantó para el 31 de octubre la publicación de los detalles de su plan económico.
La gobernante también aseguró este miércoles que mantendrá su promesa de campaña de no recortar el gasto público ni los beneficios sociales para financiar su reajuste fiscal, pero no dio detalles sobre la forma en que pretende respaldar su estrategia económica.
En declaraciones este viernes a Sky News, el diputado laborista y ministro “a la sombra” (opositor) para el cambio climático, Ed Miliband, afirmó que el gobierno conservador se está derrumbando, y quiere tomar al público por tonto, al tratar de achacar la crisis a la situación económica internacional.
Ningún otro ministro de finanzas está regresando de forma apresurada de la reunión del FMI, ningún banco central de otro país tuvo que comprar (de bonos) de forma emergente, y no hay otro país donde la política económica del gobierno se esté desmoronando, afirmó.
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