El portal G1 indica que el ministro atendió un pedido de la organización política Red de Sustentabilidad (REDE), la cual argumenta que existen evidentes ataques al proceso electivo por parte del mandatario de tendencia ultraderechista Jair Bolsonaro, quien ambiciona reelegirse por el Partido Liberal.
REDE denuncia que el exmilitar defendió en una transmisión en vivo por Internet que se hizo auditoría en las urnas y no por la propia Justicia Electoral.
Según la orden del timonel del TSE, el plazo para que la cartera presente los documentos es de 48 horas y deberá informar cuál fue la fuente de los recursos gastados en la auditoría.
Asimismo, Bolsonaro tendrá cinco días para presentar la defensa.
De acuerdo con G1, las conclusiones de la auditoría fueron entregadas al excapitán del Ejército, pero el ministerio no tiene fecha definida para divulgar los resultados.
El sitio apunta que, sin presentar jamás pruebas o siquiera indicios de irregularidades, Bolsonaro y sus partidarios atacan el sistema electoral y las urnas electrónicas, repitiendo fake news (noticias falsas) desmentidas por los órganos oficiales.
«Las noticias de realización de auditoría de las urnas por las Fuerzas Armadas, mediante entrega de informe al candidato a la reelección, parecen demostrar la intención de satisfacer la voluntad electoral manifestada por el jefe del Ejecutivo, pudiendo caracterizar, en teoría, desviación de propósito y abuso de poder», rasgueó De Moraes. REDE sostiene que Bolsonaro busca desacreditar el sistema de votación en el país y debilitar el Estado Democrático de Derecho.
Alega también que son recurrentes e innumerables los ataques dirigidos a la legitimidad del sistema electivo, incluso buscando atribuir a las Fuerzas Armadas la indebida función de «poder moderador».
El partido recalca que tal pretensión de participación desvirtuada y directa de las Fuerzas Armadas en el pleito electoral viene siendo instrumentada concretamente por medio de innumerables sugerencias hechas a este tribunal, la mayor parte de ellas infundadas y sin cualquier soporte técnico.
La Justicia Electoral confirmó que, en la primera vuelta del referendo, el expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, candidato del Partido de los Trabajadores, quedó en primer lugar, con un 48,43 por ciento de los votos válidos (se desconsideran blancos y nulos), y Bolsonaro tuvo un 43,20.
Ninguno de los postulantes logró en ese primer turno la mayoría absoluta de votos, es decir, más de la mitad de válidos (excluidos blancos y nulos), como establece el código brasileño para ser electo. Ambos políticos disputarán la segunda ronda el 30 de octubre.
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