En Michigan, por ejemplo, los electores enviaron más de 370 mil boletas, mientras que en Pensilvania y Wisconsin se contabilizan cerca de 237 mil y 160 mil respectivamente, apuntó un reporte de la cadena CNN.
Además de estos estados tradicionalmente indecisos, más de 131 mil votantes participaron en el primer día de votación anticipada el lunes pasado en Georgia, un récord de mitad de período que casi duplicó los casi 71 mil participantes en idéntica fecha en 2018.
La fuente, que cita datos de Catalist, una empresa que brinda cifras y análisis sobre el tema, aseguró cómo los demócratas muestran preferencia por emitir sus votos por adelantado, mientras muchos republicanos optan por acudir el día marcado para las elecciones, en esta ocasión el próximo 8 de noviembre.
En Pensilvania, los liberales dominan las devoluciones de las boletas electorales al constituir el 72 por ciento de todos los que han optado por esta vía, aunque la cifra es menor al 78 por ciento visto en este punto del ciclo de 2020.
En este mismo estado, los conservadores exhiben, con 20 puntos porcentuales, un índice mayor de participación que en esta fecha cuatro años atrás cuando representaron el 14 por ciento.
Acorde con la fuente, el desglose de las solicitudes de boletas por partido en esta etapa muestra diferencias poco llamativas comparado con las tres semanas antes del día de las elecciones de 2018 en Arizona.
En ese momento, los demócratas de ese territorio representaron el 34 por ciento de las solicitudes de boletas por correo y los republicanos el 37 por ciento, mientras que ahora los primeros ostentan un 35 por ciento y los segundos el 34.
Se estima que las elecciones intermedias tienen menos concurrencia que las presidenciales y, según estadísticas del último medio siglo, solo alrededor del 40 por ciento de los votantes van a las urnas en los comicios de medio término.
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