Llegó el momento de que la FED cambie a subidas menores de las tasas de interés para evitar endurecer la política monetaria más de lo necesario, y ralentizar aún más el ritmo de crecimiento económico, señaló el presidente del banco central estadounidense en Chicago, Charles Evans.
En ese sentido, el representante de la institución financiera acotó que los riesgos están en ambos lados.
Evans consideró que tras el incremento de los tipos en 75 puntos básicos el último miércoles, lo más sensato en el futuro no sería adelantar las subidas, sino buscar el nivel adecuado de restricción.
Bajar a un ritmo que no sea de 75 puntos básicos, dando al Comité Federal de Mercado Abierto de la FED un poco de margen para ver más datos antes de adelantarse demasiado a donde eventualmente quiere estar, tiene sentido para mí, acotó la autoridad monetaria.
Con la decisión de aumentar por cuarta vez consecutiva sus tasas de interés en 75 puntos básicos, el banco central estadounidense situó el tipo oficial en un rango entre el 3,75 y el 4,0 por ciento.
Especialistas del sector apuntaron que la medida forma parte del esfuerzo de la institución por elevar de forma rápida los costos de los préstamos, lo suficiente como para que empiecen a frenar el crecimiento y la inflación.
Las declaraciones Evans se suman a las de la integrante del Comité Federal de Mercado de la FED, Susan Collins, quien remarcó la posibilidad de que las futuras subidas de tasas sean menores a lo aplicado los últimos meses.
Con la inflación muy por encima del objetivo del dos por ciento del banco central de Estados Unidos, la tarea central de esta entidad financiera debe ser restaurar la estabilidad de los costos en los mercados, enfatizó Collins.
La especialista sentenció, además, que el trabajo para domar los altos precios en el país no terminó, y que aunque existen algunas señales esperanzadoras al respecto todavía no hay pruebas claras de que la inflación esté moderándose.
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