El fenómeno meteorológico golpeó en la madrugada justo al sur de la ciudad de Vero Beach con vientos de 120 kilómetros por hora, antes de degradarse rápidamente, comunicó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos(NHC).
Se espera que la amenaza de un tornado, además de fuertes vientos y lluvias, continúe durante esta jornada en partes de Florida, Georgia y Carolina del Sur.
Asimismo, una advertencia de tormenta tropical está vigente desde Juniper, Florida, hasta el río South Santee en Carolina del Sur y a lo largo de la costa oeste de Florida,- donde en septiembre pasado arrasó el huracán Ian-, y desde Bonita Beach hasta Indian Pass, además del lago Okeechobee.
Las alertas de marejada ciclónica también permanecen vigentes en la costa de Florida y Georgia.
“Dada la incertidumbre sobre la fuerza y el camino de la tormenta a medida que se acerca a Carolina del Sur, los residentes deben alistarse en caso de que se necesiten precauciones de seguridad más adelante”, dijo Kim Stenson, quien dirige la División de Gestión de Emergencias en el estado, citado por la cadena de noticias CNN.
A las 7 de la mañana, hora local, Nicole tenía vientos sostenidos de más de 96 kilómetros por horas y se ubicó a unos 48 kilómetros al suroeste de Orlando, con un movimiento de oeste-noroeste a 22 kilómetros por hora, según el NHC.
Además de las afectaciones al fluido eléctrico informadas por la compañía Poweroutage, se prevé la ocurrencia de daños ocasionados por las fuertes inundaciones y marejadas, y la caída de más de 200 milímetros lluvia en partes del este, centro y norte de Florida.
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