La solicitud de proporcionar medicamentos para interrumpir el embarazo no deseado parte de la decisión de la Corte Suprema de Justicia de anular la sentencia Roe contra Wade, de 1973, que legalizó entonces el derecho constitucional al aborto.
Los legisladores, encabezados por Elizabeth Warren y Bernie Sanders, desean que la FDA elimine ciertas prohibiciones para que las pacientes puedan obtener medicamentos como mifepristona y misoprostol, de uso seguro y efectivo.
“La decisión de la Corte Suprema pone en peligro a millones de mujeres en este país que enfrentan restricciones a la atención y los derechos vitales”, escribieron los legisladores en una carta al comisionado de la FDA, Robert Califf.
En el texto, piden a la FDA eliminar cualquier restricción «médicamente innecesaria» como formularios de consentimiento del paciente.
A medida que los estados implementan nuevas restricciones, es más importante que nunca tomar medidas inmediatas para ampliar el acceso al aborto con medicamentos, escribieron.
Con los republicanos en control de la Cámara de Representantes a partir del próximo año y con mayoría en el Senado, es probable que los demócratas no puedan tomar medidas para proteger el aborto a menos que sea a través de la autoridad ejecutiva, señalan expertos.
Tras la reversión de Roe, muchos estados aprobaron leyes que restringen severamente o prohíben por completo el aborto con medicamentos.
En 2000, la FDA aprobó la combinación de mifepristona con misoprostol, durante las primeras 10 semanas de gravidez.
Hace dos años, en 2020, el aborto con medicamentos representó el 54 por ciento de todas las interrupciones de embarazo en Estados Unidos.
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