De acuerdo con el comunicado de la institución, se sigue con cuidado todo este proceso de la especie conocida como Lora o golfina (lepidochelys olivácea), que concluirá con el nacimiento de los neonatos.
Uno de los guardaparques del Refugio Vida Silvestre, en el distrito Tonosí, dijo a la prensa que en los dos últimos años ha aumentado el número de desoves en esta zona, por trabajos significativos dirigidos por Miambiente, grupos organizados y la población.
Barría calificó estas arribadas como sucesos extraordinarios que ocurren solo en algunas playas del mundo, 11 en total y Panamá cuenta con dos de ellas: isla Cañas y La Marinera.
Por su parte, la directora de Miambiente en Los Santos, Elida Bernal, resaltó la necesidad de cuidar los océanos y mares, clave para el bienestar de generaciones futuras de esa y otras especies de quelonios.
Para Bernal el trabajo del equipo de guardaparques es clave, pues contribuye a la conservación de los ecosistemas marinos con el manejo y conservación todo el año de estos especímenes, en especial en los meses de julio a noviembre.
Desde 2009, esta zona de Los Santos, pasó a formar parte del proyecto de “Acciones para la Conservación de las Tortugas Marinas en sitios clave del Pacifico Panameño”.
Isla Cañas ofrece 14 kilómetros de playas, rodeada por más de mil 200 hectáreas de manglares con una población de 700 habitantes, que se dedican a la pesca, a la agricultura y al turismo ecológico.
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